Descubrimiento apoya que los humanos descienden de un “Adán y Eva” comunes

Científicos en Estados Unidos y Suiza anunciaron un asombroso descubrimiento: todos los seres humanos modernos descienden de un padre y una madre comunes que aparecieron en escena hace 100.000 a 200.000 años atrás después de que un cataclismo casi aniquilara a la humanidad.

Aunque los investigadores creen en una explicación evolutiva y no están señalando al Adán y Eva bíblico, ni siquiera a Noé y su esposa, su descubrimiento de ADN ha suscitado mucho debate. Puede ser uno de los estudios más desafiantes jamás emprendidos y trae un misterio enorme. ¿Qué sucedió que acabó con casi toda la vida en el planeta?

El periódico Daily Mail informa que estos nuevos hallazgos ponen en duda los patrones de evolución actualmente aceptados por la comunidad científica en general.

La investigación fue dirigida por Mark Stoeckle y David Thaler de la Universidad de Basilea, Suiza y fue publicada en la revista Human Evolution (Evolución Humana).

Los investigadores dicen que estudiaron los “códigos de barras” genéticos de 5 millones de tipos de animales y humanos – unas 100.000 especies – para llegar a sus conclusiones. Los códigos de barras son fragmentos de ADN que residen fuera del núcleo de las células vivas – el llamado ADN mitocondrial, que las madres pasan de generación en generación.

Stoeckle y Thaler también encontraron que el 90 por ciento de todas las especies animales vivas hoy día, provienen de padres que empezaron a dar a luz alrededor del mismo tiempo, en algún momento cerca de 250.000 años atrás.

CIENCIA Y BIBLIA SEGÚN FOX NEWS

Fox News reporta que el estudio se alinea con la Biblia de dos maneras notables. Fox declara:

1. Confirma que nosotros y las demás criaturas que nos acompañan en la tierra surgimos de un evento creacional reciente y profundo, orquestado por algún mecanismo aún no reconocido por la ciencia.

2. Los códigos de barras de ADN revelan que las especies son cuantificadas. En lugar de que haya una sola variedad de animales, como cabría esperar tras millones de años de evolución gradual, las criaturas caen en poblaciones muy distintas, ampliamente separadas – lo que la Biblia describe como “especies”.

Así que, en momentos en que la gente tiende a mirar sus diferencias en términos de raza, estatus social, etc., los científicos sugieren que cuando nos referimos a nuestro prójimo, en realidad nos estamos refiriendo a nuestros hermanos y hermanas genéticos.

“En un momento en que los seres humanos ponen tanto énfasis en las diferencias individuales y grupales, tal vez deberíamos dedicar más tiempo a la forma en que nos parecemos el uno al otro”, dijo el Dr. Mark Stoeckle al Daily Mail.