ONGs evangélicas de Latinoamérica trabajan para crear una red continental

Con 600 inscripciones, este 24 de junio comenzó el I Encuentro Cívico Social Evangélico, impulsado por el Congreso Iberoamericano por la Vida y la Familia.

Redacción ED

24 DE JUNIO DE 2021 · 14:00

Cartel del I Encuentro Cívico Social Evangélico,I Encuentro Cívico Social Evangélico
Cartel del I Encuentro Cívico Social Evangélico

A menudo los medios de comunicación desconocen u olvidan la enorme obra social que realizan la práctica totalidad de las iglesias evangélicas, y multitud de Asociaciones Civiles (ONGs) vinculadas a las mismas en todo el continente.

Una labor que aborda multitud de aspectos, desde apoyo a comunidades indígenas, a la educación, la sanidad, ayuda a familias en crisis, emigrantes, personas con adicciones, o mujeres que sufren violencia intrafamiliar, niños abandonados, y mujeres víctimas de la trata. Por mencionar algunos de ellos.

Este Primer Encuentro Cívico Social Evangélico ha contado con más de 600 inscripciones y tiene como meta crear una red que no sólo haga visible esta gran tarea, sino también apoyarla ofreciendo formación por parte de diferentes expertos, coordinar relaciones y esfuerzos, así como potenciar la presencia en la sociedad y en foros como la OEA (Organización de Estados Americanos).

impulsado por el Congreso Iberoamericano por la Vida y la Familia (C.Iber), hoy ha finalizado la primera de las dos Jornadas con diferentes participaciones de expertos, así como con un foro de debate y coloquio de los participantes, de una hora de duración.

 

Primera Jornada

Aarón Lara, presidente del C.Iber, es el fundador y alma de esta plataforma evangélica. Con su dirección y moderación se produjeron durante cinco horas diferentes intervenciones.

En el primer día del encuentro, el jueves 24, la bienvenida estuvo a cargo de Fulvia de Cañas (Colombia), que dio paso a Hugo Márquez (Argentina, vicepresidente del C.Iber) que explicó la importancia del Congreso Iberoamericano por la Vida y la Familia en la defensa de estos dos valores que están queriendo ser derribados por las corrientes ideológicas globalistas. Valores que junto a la justicia y la dignidad son motivo de lucha en Iberoamérica desde 2015 por parte de esta entidad, recientemente legalizada en Washington, donde ha abierto oficina.

Destacó en especial la presencia que se ha logrado establecer en la OEA, y la meta cercana de lograr esta misma presencia en la ONU.

Jorge Márquez (Uruguay) resaltó a continuación el papel fundamental de la acción de las ONGs cristianas (fundaciones o asociaciones civiles) en la sociedad, una labor y testimonio que a menudo se desconoce, oculta o ambas cosas a la vez. Una labor integral que no puede separarse de la defensa de la vida y la familia.

“Esta labor tienen no sólo influencia local en la comunidad, sino también en los gobiernos locales, regionales y nacionales. Y ahora unidos podemos tener incidencia internacional, porque se nos considera la voz de la sociedad civil” expresó Jorge Márquez.

“Para ello el C.Iber se ofrece para dar una imagen conjunta. No para tutelar, controlar o dirigir a ninguna ONG, sino para unir y multiplicar fuerzas. En 4 años de trabajo ya el C.Iber ha conseguido en 2017, tras llegar a la 47ª asamblea de la OEA como primera presencia evangélica oficial, alcanzar 5 coaliciones con voceros en la 49ª asamblea de Medellín (Colombia) en 2019 con grandes resultados. En 2020, en el 50º congreso virtual de la OEA repitieron con 5 coaliciones”.

Se expusieron diferentes testimonios impactantes, incluidos algunos realizados en medio del covid: “Dios derramó amor en la iglesia, no estrategias sociales o políticas; sino que es la esencia del Evangelio, La fe sin obras es muerta, y la obra no es una opción, especialmente en cuanto a los débiles”, concluyó Jorge Márquez.

Finalmente, animó a sumarse al C.Iber “para ofrecer una imagen unida que logre ser sal del mundo e influir donde por separado no podríamos estar”.

Márquez, junto con Samuel Petit, presentó un Instituto de Formación Cívica (InFOC) para “que el hombre de Dios esté perfectamente preparado para toda buena obra”, Una entidad que asesorará para crear ONGs legalmente sólidas, y con una profesionalidad acorde a lo que se nos exige, y cómo defenderse en caso de acoso legal o en las redes sociales, como construir una web que impacte, etc. Marketing digital, Equipos y estrategias y Liderazgo transformador son los tres cursos online que se ofrecerán a las ONGs que se hagan miembros del C.Iber. Más información en la web www.infoc.org (a partir de mañana viernes 25 de junio).

A continuación la plenaria sobre la defensa de la Vida, la Familia y las Libertades Fundamentales estuvo a cargo de la recién electa diputada nacional peruana Milagros Aguayo (fundadora de Salvemos a la Familia y Con Mis Hijos No Te Metas).

La pastora Aguayo enfatizó “la necesidad de aportar herramientas para la familia, que es el lugar más seguro y a la vez el más vulnerable del ser humano”, algo que debe extenderse en ayuda a las familias en crisis o disfuncionales.

“Debemos utilizar nuestra influencia y capacidades para ser voz de los que no tienen voz en los organismos internacionales, pero para esto hay que tener el respaldo de una labor social que muestre el amor efectivo del Evangelio en nuestras naciones. Eso es lo que desea realizar el Congreso Iberoamericano como puente de proyección continental para toda la iglesia en Latinoamérica”.

“Dios manda la ayuda al extranjero, y hoy todos somos extranjeros o los tenemos a nuestro lado. Dios ordena amar y cuidar al extranjero, la viuda y el huérfano para que Dios nos bendiga, como indica en Deuteronomio. La iglesia debe acoger, no rechazar”, agregó.

Animó a participar en la vida pública como iglesia, como ONGs, en actividad política, para que los valores de la Palabra de Dios alcancen a la sociedad. Esto, dijo, “supone salir de nuestra zona de confort, hacernos vulnerables, pero eso es lo que hizo Jesús”.

“Los éxitos no valen de nada si no tenemos un corazón listo para abrazar y proteger a los nuestros, a los próximos, porque nos haríamos peores que animales. Y Dios es el que nos ayuda a amar al prójimo como a mí mismo”.

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