El ex pelotero de Grandes Ligas, David Ortiz, pidió ayer domingo a los dominicanos no cuestionar a Dios ante la magnitud de la tragedia ocurrida el pasado 8 de abril en la discoteca Jet Set.

El colapso del techo de la discoteca, en Santo Domingo, República Dominicana. Se produjo durante un concierto de merengue del artista Rubby Pérez, quien falleció a causa del siniestro.​ El incidente tuvo un saldo de más de 225 heridos y 226 fallecidos.

“Sé que muchos estamos cuestionando a Dios por una eventualidad de esta magnitud. Pero nunca podemos cometer el error de presionar a Dios. Él tiene una forma de comunicarse con nosotros que muchas veces se nos hace difícil entender”.

Acompañado de familiares de los fallecidos, autoridades locales y cientos de ciudadanos conmovidos, el también llamado “Big Papi” compartió un mensaje de reflexión, recordando su propio dolor personal por la pérdida de su madre y los momentos difíciles que vive con la salud de su padre.

“Todos los días me encomiendo a Dios y le doy gracias por la oportunidad que nos da de compartir con nuestros seres queridos. Cada uno de nosotros tiene un ciclo que cumplir, y el único que sabe ese ciclo es Papá Dios”, manifestó.

David Ortiz aprovechó la ocasión para hacer un llamado a la sociedad dominicana a reflexionar sobre sus valores y volver al camino de la fe.

“Dios nos está hablando como nación. Tenemos que prestarle atención, volver a encomendarnos a Él y valorar lo que realmente importa: la familia, el respeto, el amor”.

El ex pelotero concluyó su discurso reconociendo el dolor colectivo y exhortando a mantenerse unidos como pueblo. “Esta herida no sanará pronto, pero si nos damos amor unos a otros, podremos seguir adelante como la gran familia que somos los dominicanos”, expresó.

Una vida única con Dios presente

David Américo Ortiz Arias, conocido popularmente como “Big Papi”, es una figura icónica en el mundo del béisbol dominicano y norteamericano. Nacido en Santo Domingo el 18 de noviembre de 1975, Ortiz ha dejado una huella imborrable en el deporte, tanto en su país natal como en los Estados Unidos.

Diez veces seleccionado para el Juego de Estrellas, «Big Papi» fue pieza fundamental de que Boston conquistase tres campeonatos de la Serie Mundial antes de retirarse al final de la temporada de 2016.

David Ortiz, reveló algunas lecciones de vida y su agradecimiento a Dios en muchas ocasiones, una destacada fue al ser admitido como miembro del Salón de la Fama de Cooperstown.

“Yo he pegado muchos jonrones en mi carrera. La gente se ha llenado de emoción por ellos. Pero yo creo que los verdaderos jonrones lo estoy dando ahora”, dijo refiriéndose a su Fundación Fondo para la Niñez; una organización sin fines de lucro, fundada en el año 2007, que opera en República Dominicana y en Boston, Massachusetts, Estados Unidos. “Creo que darle la oportunidad a un ser humano de tener una vida normal eso va más allá de lo que nosotros somos”, expresó.

En este sentido, explicó que él vive en esta labor ‘dioscidencias’. “Experiencias en las que es como si Dios me estuviese diciendo ‘lo que estás haciendo, síguelo haciendo. Yo te puse ahí para eso’”.

 Y continuó: “Dios se ha pasado conmigo, para empezar. Me ha dado demasiado. No le puedo pedir a Dios más de lo que me ha dado”, dijo. “Yo me veo un día predicando su palabra…. Yo me veo en esa porque es que yo entiendo que los tiempos están cambiando y hay mucha gente afuera que necesita escuchar más de la Palabra de Dios, la gente está muy loca, muy desacatá, están pasando cosas que de verdad… yo soy un tipo que vengo de barrio y yo estoy viendo que es que están pasando muchas cosas locas”.