Retienen a indígenas evangélicos por intolerancia religiosa

El nuevo caso ocurrió en Chiapas y está relacionado a la celebración de una festividad católica tradicional.

    Redacción ED

    Cuarto Poder · CHIAPAS · 25 DE ABRIL DE 2019 · 13:00

    Festividades religiosas en Chiapas son aprovechadas para perseguir a evangélicos,
    Festividades religiosas en Chiapas son aprovechadas para perseguir a evangélicos

    Al menos 12 indígenas evangélicos del municipio de Zinacantán, estado de Chiapas, fueron llamados a una asamblea comunal para supuestamente tratar temas de interés general de su comunidad. Sin embargo, la reunión tuvo como fin organizar la festividad católica de la Santa Cruz que se llevará a cabo el 3 de mayo. Los evangélicos fueron retenidos cuando se negaron a participar de la reunión.

    Luis Antonio López Herrera, abogado e integrante de la asociación “Misión 21 Gramos”, encargada de apoyar de forma jurídica a víctimas de persecución religiosa en Chiapas, detalló que las 12 personas se mantuvieron retenidas contra su voluntad durante casi 24 horas.

    La reunión citada también tenía como objetivo la elección de ciertas autoridades denominadas “mayordomos”. Todo dentro de las costumbres del pueblo católico chiapaneco. Estos “mayordomos” tienen la responsabilidad de gestionar, administrar e incluso contribuir económicamente para que se lleve a cabo la festividad católica.

    De una forma aparentemente premeditada los presentes decidieron que Juan Hernández Pérez, quien es pastor evangélico, fuera el mayordomo. Hernández inmediatamente desistió del puesto.

    Los hechos se suscitaron el domingo de Pascua. La negación del pastor Hernández trajo como consecuencia que fuera retenido por casi un día entero junto a 11 personas más pertenecientes a su congregación.

    Además del mencionado pastor, fueron igualmente privados de la libertad: Martín Hernández Pérez, Antonio Hernández Pérez, Marcos Hernández Pérez, Mariano Hernández López, Juan Hernández Vázquez, Carlos Hernández Vázquez, Mateo Hernández Vázquez, Mariano Hernández Pérez, Lorenzo López Pérez, Carmen Vázquez Hernández, y Mario Vázquez Vázquez. Todos ellos miembros de la Iglesia Pentecostés Cristo Viene.

    Además de la detención arbitraria, Hernández y los otros 11 evangélicos al regresar a sus hogares detectaron que les fue cortada la electricidad y les derramaron el agua que mantenían recolectada para su uso.

    Según el abogado López Herrera, esta acción fue encabezada por un grupo simpatizante del Partido Revolucionario Institucional (PRI), quienes lideraban la organización de las fiestas tradicionales en la comunidad.

    López indicó que fue la Secretaría de Gobierno, quien por medio de un oficio dirigido al Ayuntamiento de Zinacantán propició la liberación de estas personas.

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