Pecado es pecado, gracia es gracia
Si alguien es luz y sal del evangelio, debe compartirlo con aquellos que saben que lo necesitan.
28 DE ABRIL DE 2019 · 08:00

Las personas que viven fuera de la verdad de Dios creen que porque algo es legalizado por una Corte de Justicia humana es que es lícito ante Dios. Se ufanan apañando su pecado con el disque "derechos humanos", que no es más que desechos humanos que se ha institucionalizado, y que al final de los tiempos condenará eternamente a todos aquellos que no se arrepientan antes de morir.
Romanos 6:23 "Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro."
En cierta ocasión, una persona fue a consejería con su pastor, y le preguntó, ¿Qué debo hacer para apartarme de las malas amistades? A lo que el pastor le respondió: no tienes que apartarte de ellas. Cuando decidas vivir conforme al verdadero evangelio, una a una se apartarán de ti.
Muchos cristianos caen en esa trampa con una tolerancia apañadora, donde ven personas que dicen llamar "amigos" que van caminando hacia una muerte eterna segura, y todo por no tener problemas y tirárselas de "prudentes" dicen que respetan a cada quien y conviven, pero no les predican el evangelio.
Si alguien es luz y sal del evangelio, debe compartirlo con aquellos que saben que lo necesitan. Pero no es correcto, que alguien solo por no perder una amistad, tenga que callar la verdad de Dios, entonces es una falsa amistad.
Un verdadero amigo, no permite que alguien siga en un camino que lleva el seguro de muerte. Si alguien, después que se le predica insistentemente la verdad del evangelio, persiste en su pecado, pues él mismo es responsable de su vida.
Proverbios 12:26 "El buen amigo da buenos consejos; el malvado se pierde en su maldad."
Pero debemos tener cuidado con el prejuicio genérico del pecado, con esto me refiero, a que una cosa es la persona y otra cosa es el pecado.
El pecado no se debe personalizar. No porque alguien esté en algún pecado es que se debe odiar a la persona, porque entonces ¿dónde está el amor de Dios?
Los dos extremos son malos: los cristianos que andan con pecadores y guardan silencio amando todo lo que hacen por no perder su amistad, y los que odian a las personas porque son homosexuales o por algún otro pecado. Lo que se debe aborrecer es el pecado y salvar las personas que están presas por el maligno.
No porque este legalizado consumir vino y cerveza es que es bueno, cuando la Biblia dice que los borrachos no entrarán al reino de los cielos (1Corintios 6.10). De igual manera con el aborto, el homosexualismo, etc. No solo porque se legaliza es que deja de ser pecado. Pecado es pecado delante de Dios; y cuando alguien decide en vida abandonar todo pecado para volverse a Dios, pues Dios le perdona y le limpia, porque delante de Dios, la obra que hizo Jesucristo en la cruz del calvario manifiesta que, gracia es gracia de perdón.
¡Vuélvase a Dios todo aquél que está en pecado... y obtendrá el amoroso perdón eterno!
Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - Manantial - Pecado es pecado, gracia es gracia