Nunca en los casi 60 años transcurridos desde la introducción de la Ley del Aborto (1967) ha habido tantas interrupciones voluntarias del embarazo en Inglaterra y Gales.

El gobierno del Reino Unido presentó las cifras definitivas de 2022, que muestran que hubo 251.377 abortos en Inglaterra y Gales (un aumento del 17% en comparación con 2021, cuando la cifra total fue de 214.256).

El 98% de los abortos en 2022 se realizaron bajo la "Causal C", que tiene que ver con "un riesgo, mayor que si el embarazo fuera interrumpido, de lesión a la salud física o mental de la mujer embarazada".

Según el informe del Departamento de Salud y Asistencia Social, "el 82% de los abortos fueron de personas cuyo estado civil se dio como 'soltero', una proporción que se ha mantenido más o menos constante durante los últimos 10 años".

Mujeres en la veintena

La mayoría de las mujeres que buscaron un aborto tenían entre 20 y 22 años, las edades en las que la mayoría de las mujeres buscan abortar.

Los "abortos repetidos" (mujeres que tuvieron un aborto que no fue el primero) aumentaron de 91.313 en 2021 a 102.689 en 2022, un aumento del 12,5%.

Los factores financieros han influido principal o parcialmente en la decisión de interrumpir un embarazo para el 57% de las 1.300 mujeres encuestadas por el Servicio Británico de Asesoramiento sobre el Embarazo este año. Meanehile, un 36% dijo que no había podido obtener la anticoncepción que deseaba o que había enfrentado retrasos, lo que llevó a embarazos no deseados y abortos posteriores.

En 2022 se produjeron 3.124 abortos selectivos por discapacidad, y el 88% de los abortos se realizaron antes de la décima semana de embarazo.

Una "tragedia nacional"

El grupo provida Right To Life UK ha descrito estas nuevas cifras como una "tragedia nacional" y ha pedido "el restablecimiento urgente de las citas presenciales", una opinión compartida por el 71% de las mujeres, según encuestas recientes.

"Cada uno de estos abortos representa un fracaso de nuestra sociedad a la hora de proteger la vida de los bebés en el vientre materno y un fracaso a la hora de ofrecer pleno apoyo a las mujeres con embarazos no planificados".

Las encuestas en el Reino Unido muestran que el 70% de las mujeres quieren que se reduzca el límite de tiempo actual para abortar, que está en 24 semanas. Este límite es más alto que en la mayoría de los países de Europa. Solo el 16% apoya las propuestas de algunos grupos políticos de despenalizar completamente el aborto.