Protestantismo en América Latina ayer, hoy y mañana

Una reseña y reflexión sobre la obra literaria de Pablo Deiros.

07 DE ABRIL DE 2024 · 08:00

Pablo Deiros,Pablo Deiros
Pablo Deiros

Gran parte de la crisis del pensamiento teológico evangélico de hoy es que en medio de este turbulento revoltillo de ideas y pensamientos que vive el mundo, en medio de este desenfrenado correr hacia cualquier que cosa que nos distraiga y nos haga vivir el instante, estamos siendo apáticos para reflexionar sobre las verdades supremas de la vida y del universo.

Estamos olvidando la propuesta central de Dios revelada en su Palabra, estamos dejando de reflexionar y ver la vida más allá de lo sensacional, momentáneo y pasajero.

Estamos siguiendo movimientos e ideas simplemente porque están de moda, porque venden. No estamos examinando su pertinencia. No nos estamos deteniendo a ver qué tan importantes son las tendencias actuales y que tan edificantes y acordes están con nuestros fundamentos y valores.

Nos dejamos llevar de la ola emocional, seguimos el curso de la corriente y nos invalidamos, nos anulamos y nos echamos a un lado dejando de construir nuestras creencias y valores sobre sólidas convicciones que apunten a reafirmar nuestra fe y nuestra realización como personas que saben tienen un propósito trascendente.

La cultura occidental en su más amplia extensión se ha construido sobre la suma de la fuerza del pensamiento humano recogida en los libros. Sin duda, la Biblia es el libro más influyente de la cultura occidental. La Ilíada y la Odisea de Homero, El Príncipe, de Maquiavelo, los muchos escritos que generó la Reforma Protestante. Carlos Marx, Freud, Descartes con el “Discurso del método”, “Pedagogía del oprimido” de Paulo Freire, Alexis de Tocqueville y la Democracia en América… en fin, es bastante amplia la lista de libros influyentes, libros que han marcado caminos para la historia de la humanidad o para una parte significativa de ella. Son libros que han definido y marcado nuestras instituciones, el Estado, la sociedad, la manera de pensar y vivir, incluso, la forma de conocer e interpretar la realidad.

Cuando el marxismo aún se ufanaba de imbatible y de verdad única y definitiva, emergió a partir de la década del 60 de manos del Movimiento Estudiantil Universitario una literatura evangélica que impactó toda una generación. Entre esos libros podemos citar “Dialogo entre Marx y Jesús” de Samuel Escobar, más luego “El evangelio y la cultura” y otros libros importantes. Ya en 1958 John R. Stott había publicado Cristianismo Básico, una joya apologética y evangelística al mismo tiempo.

El primer congreso CLADE (Congreso Latinoamericano de Evangelización) se llevó a cabo en 1969 en Bogotá, Colombia. Este evento fue un hito significativo en la historia del movimiento evangélico en América Latina y reunió a líderes, misioneros y teólogos evangélicos de toda la región para reflexionar sobre la misión y el papel de la iglesia en el contexto latinoamericano.

El congreso CLADE continúo celebrándose con varios encuentros posteriores que han tenido lugar en diferentes países de América Latina. Imposible dejar de mencionar la revista Certeza, una publicación teológica que alcanzó un nivel especial de preferencia entre los estudiantes evangélicos de América hispana.

Todo este esfuerzo de reflexión sobre la fe evangélica estaba enmarcado en la era moderna. El antagonista ideológicamente frontal del cristianismo era el marxismo, que pasa también a ser cuestionado a partir de su crisis y posterior derrumbe junto a los muros de Berlín en 1989.

De forma referencial la postmodernidad había quedado iniciada, precisamente con el libro "La Condición postmoderna”, del filósofo francés Jean-François Lyotard, en el que analizó los cambios en la cultura y el conocimiento en la sociedad contemporánea.

Como sucedió en otras épocas, estos cambios han tenido impacto notable en la religión y muy específicamente en la iglesia evangélica en América Latina, y nadie los analiza con mayor sustancia, simpleza y claridad que el historiador argentino, Pablo Deiros, en su libro “Protestantismo en América Latina: ayer, hoy y mañana”, publicado por Editorial Caribe en 1997.

Quienes leímos esta obra encontramos en ella múltiples e importantes respuestas a muchos de los fenómenos que comenzaron a estremecer la iglesia evangélica de estos tiempos. Es una análisis histórico, crítico y reparador muy bien pensado. Es de carácter eclesiológico y misional, pero sumamente orientador y pone en perspectiva la iglesia de cara a sus principales desafíos para su presente y futuro. Es un libro de lectura imprescindible.

Es un libro didácticamente organizado en etapas y procesos para comprender de manera sencilla y práctica un fenómeno histórico y religioso de manera amplia y global en el marco temporal del ayer, el hoy y el mañana. Su esquema sitúa al lector de inmediato con índice definido por preguntas:

  1. ¿De dónde hemos venido?
  2. ¿Cómo nos hemos desarrollado?
  3. ¿Cuál ha sido nuestro perfil?
  4. ¿Dónde estamos?
  5. ¿Hacia dónde vamos?
  6. ¿Cómo estamos yendo?
  7. ¿Qué podemos esperar?

En este marco temático el autor desarrolla temas como las sociedades bíblicas y misiones protestantes, diversos y divididos, crecimiento de las grandes ciudades, un protestantismo y diversas formas, el descompromiso evangélico, un evangelio limitado y un evangelio integral, énfasis individualista, iglesias estáticas e iglesias que cambian, de un protestantismo denominacional a un protestantismo posdenominacional, proyección de las mega iglesias en América Latina, un protestantismo histórico y un protestantismo pentecostal y carismático.

Otros de los temas que hacen atractiva esta obra son: de un protestantismo burgués a un protestantismo pobre, de un protestantismo institucional a un protestantismo del Reino, de un protestantismo introvertido a un protestantismo protagonista. Además, una nueva cultura en gestación, propuesta de una nueva estrategia y otros interesantísimos temas.

La transformación del culto y la educación teológica son temas transversales que están presente a lo largo del libro, que observa un sostenido rigor sociologico-historico, siempre con sencillez y en un lenguaje trepidante y ágil.

Un libro que sigue el curso de la iglesia en un mover histórico determinado porta en su estilo y desarrollo un cierto aire profético como se puede percibir en el tratamiento del tema “de un protestantismo moderno a un protestantismo posmoderno”, donde el autor destaca la configuración en el tiempo que viene del desarrollo de una cultura con nuevas pautas de conducta que se manifiestan en el anhelo de crecimiento, autenticidad y amplitud de la experiencia personal. “El ser humano de hoy quiere experimentar la vida y a Dios de manera directa, y no de manera indirecta o secundaria a través de mediadores o intérpretes humanos e institucionales más o menos estandarizados”.

El autor advierte de una nueva cultura en gestación caracterizada por organizaciones más fluidas, que se resisten a crear estructuras jerárquicas y son adversas a los dogmatismos.

Énfasis sobre lo espiritual/emocional. En el futuro, las necesidades espirituales y emocionales del ser humano recibirán más atención que la razón y el método del pensamiento científico. Quienes mejor se adapten a estos cambios y sepan evaluarlos a la luz del evangelio, serán los que responderán de manera más efectiva a los desafíos que se presenten y los que mayor gloria traerán al reino de Dios”.

De un protestantismo denominacional a un protestantismo posdenominacional. El denominacionalismo evangélico, al igual que la modernidad que le dio origen, está entrando en crisis en estos días de posmodernidad. Al menos, algunos de sus productos lo están, como las misiones modernas y la educación teológica residencial.

Sin embargo, el autor no se quedó en este libro, con el ímpetu de su éxito inicial, sino que publicó tres volúmenes más que, sin dudas, son la continuación del primero. A partir del 2006, Deiros dio a conocer una serie ministerial con el sello de Ediciones Certezas.

El primer tomo se titula “La iglesia del nuevo milenio”; el segundo, “La iglesia como como comunidad terapéutica” y un tercer volumen, “La iglesia en Latinoamérica: su vida y su misión, para un programa doctoral en Teología” (Prodola), junto a Alberto Roldan y Carlos Van Engen, además de otros reconocidos teólogos del continente.

Lo que deploro en definitiva con este ejemplo del libro del doctor Deiros es que siento que en este tiempo de confusión y crisis no tenemos una bibliografía mínima compartida, un currículo informal conocido que nos ayude en la implementación de una teología que oriente y afirme con mayor facilidad, propiedad y alcance lo que somos y debemos ser como creyentes que creen en la Palabra de Dios y han puesto toda su esperanza en Jesucristo.

Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - Para vivir la fe - Protestantismo en América Latina ayer, hoy y mañana