Debate de ideología de género en RD: águilas y gallinas

Disfruté muchísimo este lunes, 22 de julio de la participación de Agustín Laje en el Sol de la Mañana en la que defendió su tesis contra la ideología de género. Me gustó porque la invitación no fue para una simple entrevista, fue una emboscada premeditada y alevosa. Al joven visitante querían hacerlo quedar mal, ridiculizarlo y burlarse de él.

Como una gallina de garras afiladas y ocultas, la contraparte escogida para Laje era Faride Raful, una polemista parlamentaria que ha dado cátedra con sus sólidos argumentos y buena oratoria en el Congreso, pero además se trata de una mujer abanderada de los nuevos movimientos femeninos. La escogencia no podía ser mejor. Pero evidentemente hubo una mala selección de la presa. Como se dice en mi campo, fue un pleito mal casao.

Agustín Laje se comió viva a la dama Faride junto al coro de periodistas que se sumó a la gallera. El joven cristiano fue seguro, rápido y preciso en sus respuestas. Sus ideas y el contenido de sus argumentos fueron imponentes e irrefutables.

Lo que debió y quiso ser un debate, degeneró en una alborotada y bulliciosa desbanda de periodistas que perdieron su compostura profesional para atacar, aunque con muy poca efectividad, la exposición y el discurso de su invitado. Tan bajas y degradantes fueron las reacciones de los “entrevistadores” que en un momento, del debate ideológico, se pasó al ataque personal, y aún ahí, en ese terreno, Laje se la lució respondiendo con seguridad y decoro.

Laje demostró una preparación intelectual extraordinaria, un destreza conceptual fuera de serie, y ser un polemista diestro, capaz y corajudo. La participación de Laje en el Sol de mañana este lunes 22 de Julio fue convincente, certera y apabullante.

Hoy Faride pudo entender que las águilas pueden volar como las gallinas, pero, nunca, las gallinas podrán volar como las Águilas.