La fascinación del ser humano por viajar en el tiempo viene de hace mucho tiempo y yo no soy la excepción.

¡Yo volví del futuro! Y si. Técnicamente el sol sale del Este. El 4° Congreso de Lausana (L4), celebrado en Incheon-Seúl, Corea del Sur desde el 22 al 28 de septiembre de 2024, se encuentra 12 horas más adelante que nuestra bella Buenos Aires.

Creeme que no pude acostumbrarme. Cuando en Buenos Aires eran las 10 PM del Sábado, en Corea eran las 10 AM del Domingo. Además de ese dato astronómico, pude vivenciar recorriendo sus calles que también está en la avanzada de la comunicación, industria, transporte, infraestructura. Han dejado atrás viejas historias dolorosas enfocándose en construir una sociedad justa y próspera ¡Y lo están logrando!

Vine del futuro también porque tuve la oportunidad de conectar con temas de relevancia para los próximos años de la Iglesia Global. Este L4 celebró los 50 años de la creación del movimiento. Es mundialmente reconocida la influencia del movimiento. Por ejemplo, cuando se describiera la ventana 10/40 o Billy Graham anticiparía que en esta época el centro del mundo de la innovación, el desarrollo y la prosperidad estaría en Medio Oriente y Asia, abandonado el eje Rusia-USA.

Lo que se discute en L4 tiene una alta relevancia por su alcance y capacidad de anticipación. Previamente al Congreso, se identificaron 25 brechas para el cumplimiento de la Gran Comisión. El objetivo planteado era discutir, trabajar y proyectar espacios de colaboración hacia la reducción de esa brecha poniendo como horizonte temporal el año 2050.

IA & Transhumanismo

Estuve participando de la brecha IA & Transhumanismo. Durante cuatro días discutimos sus alcances, desafíos y oportunidades junto a otros hermanos de Filipinas, India y Noruega. Sacamos conclusiones muy valiosas que abren la discusión y reflexión futura.

"El transhumanismo es el intento de transformar sustancialmente a los seres humanos mediante la aplicación directa de la tecnología" (1)

Vemos los avances en la salud, por ejemplo y nos deslumbra. Por un lado, las prótesis externas han mejorado sustancialmente con las del pasado. Por el otro lado, hay personas que sufrían Parkinson y ahora dejan de moverse por la inserción de un chip o hipoacúsicos que empiezan a escuchar.

El transhumanismo plantea la hipótesis del post-humano como lo conocemos, una versión mejorada con la integración de tecnología. No sabemos aún si es factible, pero existe la posibilidad.

Este avance puede verse como una amenaza u oportunidad. Estamos desafiados a tener una reflexión teológica del transhumanismo que brinda respuestas a esta nueva realidad que se avecina. ¡Te dije que había viajado al futuro! Más adelante compartiré más acerca de este atrapante tema.

L4 un llamado a la colaboración

Durante el Congreso L4 se expidieron diversos temas durante los 8 días de reuniones. Algunos generaron más controversia que otros. Quisiera presentar brevemente los más sobresalientes que provocan un llamado para la Iglesia Global, dejando para otro momento aquellos aspectos críticos.

• L4 hizo un llamado a vivir un arrepentimiento genuino que cultive un verdadero avivamiento. Sarah Breuel enfatizó, "sólo Dios puede enviar un avivamiento. No podemos lograrlo sólos, pero podemos posicionarnos, orar por él y eliminar los impedimentos a través del arrepentimiento personal y corporativo". El avivamiento no es sólo conversiones masivas, sino más bien transformación social.
• L4 hizo un llamado al discipulado uno a uno, cercano e íntimo. "El discipulado no es una estrategia más, es LA ESTRATEGIA DE DIOS." El discipulado radical es un estilo de vida humilde y cariñoso que transforma vidas y relaciones en la sencillez de lo cotidiano.
• Otro aspecto clave para el presente y futuro de la misión de Dios, son los cristianos mal llamados "seculares". L4 hizo un llamado a invertir en ellos. El 99% de los cristianos, trabaja en el mercado. Es necesario cambiar la mentalidad haciendo discípulos a través de ellos. No hay distinción ya entre clérigos y seculares. No existen trabajadores a tiempo completo o a tiempo parcial. No hay ciudadanos de segunda clase que participen en el reino de Dios ¡Todos somos importantes! Reconozcamos que la misión de Dios, se desarrolla con personas comunes, no reconocidas ni celebradas para que Jesús sea verdaderamente conocido.
• L4 hizo un llamado a que reconozcamos y ayudemos a quiénes están siendo perseguidos. Ellos son parte de nuestra Iglesia también. El sistema del mundo nos quiere callar, pero al contrario, la persecución amplifica el Evangelio. Farshid Fathi pastor iraní, concluye "la persecución no es el final de la historia. Es parte del plan divino de Dios para construir Su Iglesia". Irán ha sufrido el martirio de siete pastores en la década del '90. Luego de pasar por esa etapa oscura, hoy es una de las Iglesias con más crecimiento con 1 millón de cristianos. La persecución nunca limitó a la Iglesia.
• El L4 hizo un llamado al servicio humilde e íntegro como un estilo de vida. Necesitamos más de Jesús y menos de nosotros. Tenemos que hablar más de Él y menos de nosotros. El Evangelio se trata de Jesús, no se trata de nosotros como líderes o nuestros logros ministeriales.
• L4 hizo un llamado a trabajar de manera intergeneracional. Nos necesitamos unos a otros. Dios es Dios de Abraham, Isaac y Jacob. Mientras las nuevas generaciones están en el campo con audacia ganando terrenos para el Reino, los más experimentados deben acompañarlos con su experimentado consejo.
• L4 hizo un llamado a la reconciliación. Aquellos pueblos, naciones y etnias que han sufrido dolorosas situaciones tienen la oportunidad de encontrar en Cristo una resignificación. Rolando Lidorio hizo misión en Amazonas. Durante una reunión se presentaron dos tribus que estaban enfrentadas entre ellas. Había tensión en el ambiente. Todos esperaban que hubiera una reacción violenta, sin embargo ambas tribus no lo hicieron. Al contrario, superaron sus diferencias gracias a Cristo y compartieron la reunión como hermanos. El Evangelio redime nuestras viejas enemistades sanando las historias culturales que nos ataban y limitaban.

Conclusiones

La Iglesia es hermosa. Claro que hay aspectos que debemos corregir, pero depende de nosotros escoger con qué parte nos quedamos. Si trabajamos juntos es más efectivo y hermoso. L4 hizo un llamado a unirnos en la gran comisión COLABORANDO en ecosistemas sanos y generosos. Es necesario, que rompamos las barreras que nos separan con el objetivo de culminar con la tarea que nos encomendó Jesús. Así lo expresó Michael Oh, director ejecutivo lobal del Movimiento de Lausana, "el Cuarto Congreso de Lausana no será sólo un evento histórico, sino una colaboración histórica: una acción colaborativa de la Iglesia declarando y mostrando a Cristo juntos".

Como respuesta a ese desafío, el Dr. Bill Wilson, presidente de la Fraternidad Pentecostal Global y Universidad Oral Roberts, hizo un llamado a colaborar, "quiera Dios que en el siglo XXI haya una colaboración cada vez mayor entre los evangélicos y los creyentes llenos del Espíritu para llevar la Buena Nueva en palabras y obras a las naciones."

El sufrimiento de la Iglesia perseguida es un llamado a cada creyente a despertarse. A buscar con arrepentimiento la Presencia de Jesús que encienda nuestros corazones por los perdidos y las personas hambrientas de Dios, abandonando nuestros pequeños reinitos para abrazar el sueño de Dios para la Creación.

Vine del futuro. Así es, para juntos desafiarnos a construir hoy la Iglesia que querría ver mañana. ¿Seremos la generación que esparza el Evangelio a toda lengua y nación? ¿Podremos predicar a Jesús en todos los idiomas y dialectos que existen? ¿Seremos capaces de salir de las cuatro paredes a llevar el Evangelio a dónde están las personas hambrientas de Dios? ¿Dejaremos las peleas internas para abrazar la Gran Comisión?

Hoy tenemos la oportunidad de hacerlo. El mundo se ha achicado, la tecnología aplicada a la comunicación y la infraestructura nos permite acercarnos a más personas en más lugares.

Así como el apóstol Pablo usó las rutas romanas para esparcir el Evangelio, plantar Iglesias y llevar el testimonio de Cristo al núcleo del Imperio Romano, hagamos lo mismo hoy. Usemos los canales que la tecnología nos habilita para terminar con la Gran Comisión. Jesús aún está esperando que lo hagamos. Así es Señor, aceptamos el desafío, aquí estamos... Envíanos a nosotros.