Los 10 sonetos más bellos para Cristo

Entrego los cinco primeros.

    28 DE JULIO DE 2024 · 08:00

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    Imagen de diseño propio realizada por IA

    En este artículo encontrarás cinco bellos sonetos para Jesús y la próxima semana publicaré cinco más.

    Con el título ‘Los 10 sonetos más bellos para Cristo’ no pretendo decir que los sonetos que comparto sean los mejores que se han compuesto para el Salvador. Únicamente hago una declaración a modo de desiderátum; un decir, que los mejores sonetos (composición lírica por excelencia), los más bellos, los merece Cristo, tanto como El Mesías de Händel en música, La Pasión de Mel Gibson en cine, Las Crónicas de Narnia o El Progreso del Peregrino en literatura fantástica, que son obras excelsas y con una clara vocación de ofrenda de amor y gratitud al Señor Jesús.

    Del soneto se ha dicho1 que Apolo inventó esta clase de composición como piedra de toque para mortificación y prueba de todos aquellos que alardean de ser poetas. Un soneto es una composición poética2 surgida en Europa en el siglo XIII y sumamente frecuente hasta el siglo XVII, que está formada por 14 versos de arte mayor (generalmente endecasílabos, es decir, de once sílabas). Los sonetos están organizados en cuatro estrofas fijas: dos cuartetos (de 4 versos cada uno) y dos tercetos (de tres versos cada uno).

    Esta poética combinación llena de elegancia y sonoridad, breve y maravillosa caja de música para el espíritu, fue creada en Italia por Piero della Vigna. Después de que en ella se lucieron Petrarca y Dante, llega a España, en donde los primeros en adoptar este precioso molde fueron Boscán y Garcilaso.

    Los principales representantes del soneto en lengua castellana fueron poetas del Siglo de Oro (siglo XV al XVII), como Garcilaso de la Vega, Juan Boscán, Lope de Vega, Luis de Góngora, Francisco de Quevedo, Pedro Calderón de la Barca y Miguel de Cervantes3. A fines del siglo XIX se destacaron autores del modernismo como Manuel Machado y, más tarde en el siglo XX, los integrantes de la generación del 27: Federico García Lorca, Jorge Guillén y Rafael Alberti. En América se destacaron Sor Juana Inés de la Cruz (en el siglo XVII) y, muy posteriormente, en el siglo XIX, los modernistas latinoamericanos, como el poeta nicaragüense Rubén Darío (que introdujo los alejandrinos, versos de catorce sílabas). El soneto llegó también en Francia, mientras que en lenguajes nórdicos empezó a ser usado por Shakespeare y Wordsworth.

    Y ya, sin más preámbulo, os presento los cinco sonetos de este artículo. En el próximo soliloquio podremos leer los cinco restantes.

    Por cierto, incluyo al final del artículo una breve nota biográfica de cada poeta mencionado.

     

    Gertrudis Gómez de Avellaneda4

    Al nombre de Jesús

    Es grata al caminante en noche fría

    la alegre llama del hogar caliente;

    grata al que corre bajo sol ardiente

    la fresca sombra de arboleda umbría;

    grato, como dulcísima armonía,

    para el sediento el ruido de la fuente,

    y grato respirar en libre ambiente

    para quien sale de mazmorra impía.

     

    Es grata, en fin, la lluvia al campesino;

    grata al guerrero belicosa fama,

    y grato el natal suelo al peregrino;

    pero más que aire, sombra, fuente, llama,

    lluvia, patria, laurel, ¡Jesús divino!,

    tu nombre es grato al corazón que te ama.

     

    Zacarías Zuza Brun5

    Bodas

    Será al atardecer, cuando dormida

    esté la vega, y el sendero incierto.

    Llegarás de callado. Y yo despierto

    estaré, con la lámpara encendida.

     

    Te daré, Mi Señor, la bienvenida

    con alma alegre en el umbral abierto.

    Encenderás estrellas en el huerto

    y darás la señal de la partida.

     

    «¡Vamos», dirán tus labios sonriendo,

    «que está por el camino anocheciendo

    y ya por el pomar canta el Esposo».

     

    Yo te diré: «Esperando está la Esposa,

    mi Señor, con la veste más preciosa

    y el collar más brillante y más hermoso».

     

    Fray Gerónimo6

    Mi Dios y mi todo

    ¿Qué buscas, alma, fuera de tu esposo,

    en quien está la suma de los bienes?

    Si amor, mira por ti su rostro y sienes,

    pies, manos y costado lastimoso;

    si gustos, es dulcísimo reposo;

    si riqueza, en la suya te mantienes;

    si gracia y perfección, aquí lo tienes,

    gallardo, fuerte, noble, sabio, hermoso.

     

    ¿Qué buscas, alma, pues? Alma, ¿qué buscas?

    Fuera de aqueste amor, ¿qué amores quieres?

    ¿Por qué ya no te abrasas en sus llamas?

     

    Si no amas esta luz, tu luz ofuscas;

    si no amas esta vida, en vida mueres.

    Y si no amas a Dios, alma, ¿qué amas?

     

    Lope de Vega7

    Pastor, que con tus silbos amorosos

    Pastor que con tus silbos amorosos

    me despertaste del profundo sueño,

    Tú que hiciste cayado de ese leño,

    en que tiendes los brazos poderosos,

    vuelve los ojos a mi fe piadosos,

    pues te confieso por mi amor y dueño,

    y la palabra de seguirte empeño,

    tus dulces silbos y tus pies hermosos.

     

    Oye, pastor, pues por amores mueres,

    no te espante el rigor de mis pecados,

    pues tan amigo de rendidos eres.

     

    Espera, pues, y escucha mis cuidados,

    pero ¿cómo te digo que me esperes,

    si estás para esperar los pies clavados?

     

    Ricardo León8

    Deseo morir y estar contigo

    Adelgazar mi corazón quisiera

    como un rayo de luna sobre el ara,

    como un leve cristal que se quebrara

    con sólo un beso que tu Amor le diera.

     

    Que fuese blando como blanda cera...

    que forma y vida de tu Amor tomara,

    y en tus labios, joh, Dios!, se modelara,

    y en tus dedos, joh Dios!, se derritiera.

     

    Que limpio y suave como piel de armiño,

    consiguiera moveros y moverme

    fuera del mundo y su falaz cariño.

     

    Que fuese casto, pequeñuelo, inerme,

    como el ligero corazón del niño

    que entre los brazos de su madre duerme...

     

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    1 Fuente: Michaus, M., J. Domínguez. (1990).  El galano arte de leer 2. Antología didáctica. Trillas, México. p 133. Leído en: https://emmalva.wordpress.com/2013/04/10/sonetos-1-explicacion-de-libro/

    2 Fuente: Blog Concepto. Disponible en: https://concepto.de/soneto/#ixzz8gzEbLpks

    3 Fuente: Retrato Literario: páginas de literatura. Madrid: Héctor Martínez Sanz. Disponible en: https://retratoliterario.wordpress.com

    4 Gertrudis Gómez de Avellaneda (Santa María de Puerto Príncipe, Cuba, 23 de marzo de 1814 - Madrid, 1 de febrero de 1873), llamada cariñosamente «Carcajada» o «La Avellaneda», fue una novelista, dramaturga y poetisa cubano-española del Romanticismo. Se instaló en la Península a los veintidós años, donde comenzó a publicar bajo el seudónimo de «La Peregrina» y se dio a conocer con la novela Sab, considerada la primera novela antiesclavista (anterior incluso a La cabaña del tío Tom, de la escritora estadounidense Harriet Beecher Stowe). Es considerada como una de las precursoras de la novela hispanoamericana, junto a Juana Manso, Mercedes Marín, Rosario Orrego, Júlia Lopes de Almeida, Clorinda Matto de Turner, Juana Manuela Gorriti y Mercedes Cabello de Carbonera, entre otras. De formación neoclásica, fue valorada en su época como una de las figuras clave del romanticismo hispanoamericano. El tratamiento que dio a sus personajes femeninos la convirtieron en una de las precursoras del feminismo moderno. Entre su vasta obra, destaca su novela histórica Guatimozin, último emperador de México (1846) y sus piezas teatrales Saúl (1849) y Baltasar (1858), considerada esta última como una de las obras maestras del teatro romántico.

    5 Zacarías Zuza Brun (Irurozqui, 9 de diciembre de 1896-Bahía Blanca, Argentina, 2 de octubre de 1971) fue un poeta y sacerdote español. Tras estudiar en el Seminario de Vitoria y de Burgos, se ordenó sacerdote en 1919. Fue ecónomo en la parroquia de Zabalza y párroco en Adoain. En 1925 se fue a Argentina. Entre 1949 y 1971 se publican sus poemas en la revista Pregón. En 1991 el Gobierno de Navarra publica una selección de la obra de Zuza, bajo el título Cincuenta Poemas.

    6 Fray Gerónimo (Mallén, provincia de Zaragoza, mayo de 1587- Zaragoza, 18 de octubre de 1654), escritor, poeta, biógrafo e historiador español. Parte de sus poemas se reunió y publicó en 1876 y muestran seguir el modelo que ofrecía Lope de Vega; su temática es varia: religiosa, de circunstancias, una égloga de tono garcilasiano y sátiras como Disparates de religiosos imperfectos. Permanece inédita su Historia del Pilar y numerosos otros escritos de diverso carácter, históricos, ascéticos, escriturísticos, etc.

    7 Lope de Vega ​ (Madrid, 25 de noviembre de 1562-Madrid, 27 de agosto de 1635) fue uno de los poetas y dramaturgos más importantes del Siglo de Oro español y, por la extensión de su obra, uno de los autores más prolíficos de la literatura universal.El llamado Fénix de los ingenios​ y Monstruo de Naturaleza (por Miguel de Cervantes) renovó las fórmulas del teatro español en un momento en el que el teatro comenzaba a ser un fenómeno cultural de masas. Máximo exponente, junto a Tirso de Molina y Calderón de la Barca, del teatro barroco español, sus obras siguen representándose en la actualidad y constituyen una de las cotas más altas alcanzadas en la literatura y las artes españolas. Fue también uno de los grandes líricos de la lengua castellana y autor de varias novelas y obras narrativas largas en prosa y en verso. Se le atribuyen unos 3000 sonetos, cinco novelas,​ cuatro novelas cortas, nueve epopeyas, tres poemas didácticos y varios centenares de comedias (1800 según Juan Pérez de Montalbán). Amigo de Francisco de Quevedo y de Juan Ruiz de Alarcón, enemistado con Luis de Góngora y en larga rivalidad con Cervantes, su vida fue tan extrema como su obra. Fue padre de la también dramaturga sor Marcela de San Félix.

    8 Ricardo León (Barcelona, 15 de octubre de 1877 - Madrid, 6 de diciembre de 1943) fue un novelista y poeta español. Entre sus obras se encontraron novelas como El amor de los amores, escrito en 1907, ganadora del Premio Fastenrath de la Real Academia Española; Casta de hidalgos, de 1908; Alcalá de los Zegríes, de 1909; La escuela de los sofistas, de 1910; Humos de rey, de 1923, y Cristo en los infiernos, de 1941. También destacan sus crónicas Europa trágica, además de dos libros de poesía lírica: Lira de bronce, de 1901, y Alivio de caminantes, de 1911. Fue elegido miembro de la Real Academia Española en 1912 y entró a formar parte de ella en 1915, ocupando el sillón B.

    Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - Soliloquios - Los 10 sonetos más bellos para Cristo

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